
Descripción
Velázquez llega con tan solo 22 años a Madrid, una ciudad en plena ebullición, a la que pronto le tomará el pulso y donde acabará instalándose hasta su muerte. En ese Madrid complejo del Siglo de Oro, donde nobleza y picardía se funden, la posición de Velázquez en la Corte le convierte en un testigo privilegiado de lo que acontence. A través de sus obras, de los lugares que frecuentó y de los personajes que conoció nos adentraremos en un Madrid lleno de recoletas plazuelas, bellos rincones, y pequeñas iglesias que esconden historias llenas de curiosidades, censuras, intrigas y rivalidades de las que el pintor fue observador silencioso.